Esta innovación ya se utiliza en Europa y Norteamérica en edificaciones de mediana altura, con interesantes bajas en costos y tiempos de emplazamiento.
Lo llaman “el hormigón del futuro”, por sus ventajas en reducción de costos y tiempos de edificación, además de la sustentabilidad e innovación que aporta como solución constructiva.
Se trata del uso de madera contralaminada en pino radiata, desarrollado en Chile a través del proyecto CLT, que realiza estudios de ingeniería para facilitar la introducción de este nuevo sistema de rápida ejecución, utilizando estos elementos estructurales para el emplazamiento de edificios de mediana altura.
Financiado por Corfo, cuyo mandante fue el Centro de Desarrollo Tecnológico de la Cámara Chilena de la Construcción (CDT-CChC) y puesto en marcha bajo el alero de la Universidad de Santiago a través de su Departamento de Ingeniería en Obras Civiles, busca innovar en soluciones constructivas y colaborar en la reducción del déficit habitacional.
El trabajo del proyecto consideró el procedimiento de fabricación de madera contralaminada y su caracterización físico-mecánica; el diseño estructural, con cálculo de estructural y de uniones; un modelamiento arquitectónico y el desarrollo de un método constructivo.
Con madera contralaminada se puede elaborar un elemento estructural de madera sólida, prefabricado y susceptible de dimensionar, que se instala de manera simple y presenta una importante resistencia a cargas sísmicas. En Chile no se ha desarrollado suficientemente la edificación en madera para mediana altura, pero en otros países se ha utilizado en oficinas y viviendas sociales, entre otras.
Los miembros de AICE conocieron esta innovación en el almuerzo ampliado “Innovación en madera: cálculo estructural de paneles de madera contralaminada y diseño de uniones”, donde participaron como expositores Paulina González, directora responsable de CLT Chile y del departamento de Ingeniería en Obras Civiles de la Universidad de Santiago; el director alterno del proyecto y académico Usach, Erick Saavedra y el ingeniero Mario Wagner, gerente de INGE-WAG.
Para Alfonso Larraín, director de AICE, la instancia fue excelente para estar al día con las últimas tendencias: “Son profesionales de primera y el método de cálculo en madera es lo que se está utilizando ahora”.
Lucio Ricke, también director AICE, destacó la innovación que provee el uso de madera contralaminada y la forma de terminar las uniones: “Permite arquitectónicamente soluciones mucho más adecuadas a requerimientos específicos, porque habitualmente la madera terminaba con uniones muy bruscas que producían problemas de visión, forma y limpieza.
Me pareció muy interesante”, sostuvo.
En tanto, Carlos Sepúlveda, vicepresidente AICE, relevó la transferencia tecnológica como parte fundamental en el accionar de la Asociación. “En particular, esta innovación abre nuevas perspectivas para usar este material, por ejemplo, en viviendas sociales o edificios de 3 o 4 pisos, con un sistema de unión bastante más inteligente, que no tiene el problema de la protección contra el fuego. Me parece muy interesante, hay que profundizar su conocimiento y empezar a utilizarlo”, afirmó.
Los resultados del proyecto CLT y sus ventajas están a disposición de la comunidad a través del sitio web http://www.conmaderausach.cl/.