16 Ago 2024 Directores de AICE participaron de la WCEE 2024
Entre el 30 de junio y el 5 de julio se realizó la 18ª Conferencia Mundial sobre Ingeniería Sísmica WCEE 2024, en Milán, Italia.
AICE estuvo representada por los directores Francisca Pedrasa (presidenta), Miguel Medalla (tesorero) e Ian Watt (Past President).
Revisa las principales conclusiones de nuestros directores:
Data, los desarrollos técnicos y la AI
WCEE es un espacio de encuentro entre las diferentes miradas de la ingeniería que nos permite ser parte del desarrollo actual en materia sismorresistente. “Considerando la gran cantidad de eventos sísmicos que hay en Chile, es muy relevante que seamos parte de esta comunidad. En este sentido, fue muy grato vivenciar que en Chile, a pesar de ser un país con menos recursos, tenemos profesionales de mucha categoría y observar que somos considerados parte de este espacio de crecimiento y desarrollo técnico”, dice Francisca Pedrasa, presidenta de AICE.
La profesional comenta que en esta conferencia se mostró el crecimiento tecnológico como parte de la realidad actual, “lo que evidencia que debemos incorporar no sólo en nuestras empresas, sino que en nuestra mirada de desarrollo, la innovación y el uso constante de las nuevas tecnologías que son cada día parte más activa en nuestros desarrollos”.
Entre los aspectos más destacados por la ingeniera, está el compartir y “ver cómo los académicos y profesionales chilenos están por todo el mundo y cómo ha crecido la red de investigadores que son parte de las universidades chilenas y estamos impactando en instancias como WCEE2024. En este sentido, el visualizar cómo la colaboración que es parte de los desarrollos actuales está trascendiendo en el rubro académico y se observa cómo la data, los desarrollos técnicos y la AI son parte del hoy y que han llegado para quedarse”.
De esta manera, hay una relación con el trabajo que se está haciendo localmente: “Chile, sus académicos y profesionales trabajamos arduamente por mantener la calidad de nuestros desarrollos de proyectos e innovación, por lo que el saber que en nuestro país se están llevando a cabo avances que van de la mano de lo que se hace mundialmente es alentador y nos invita a seguir creciendo, colaborando y entendiendo que podemos hacer mucho más”, puntualiza.
Retrofit estructural de viviendas
En cuanto a edificación, Ian Watt, Past President de AICE, especifica que pudo observar “mucho avance en lo que se trata de retrofit estructural de viviendas, por ahora muy enfocado a la realidad europea, que son líderes en el área, pero espero que en el futuro esas tecnologías y métodos empiecen a poder ser usados en nuestros países, para reforzar y mejorar estructuras antiguas y patrimoniales nacionales”.
En cuanto a las tendencias en diseño sismorresistente, a juicio de Watt, “el diseño por desempeño ya dejó de ser novedad, siendo una metodología ampliamente usada en diseño de torres de gran altura, y también en estructuras híbridas, donde el comportamiento mixto de materiales requiere análisis más sofisticado”.
Pero también el cambio climático y la sostenibilidad estuvieron presentes en la WCEE2024. “Una estrategia valiosa que vimos fueron metodologías para definir qué soluciones de retrofit estructural combinarán con soluciones de sustentabilidad energética, para aprovechar de resolver ambos problemas al mismo tiempo, que es naturalmente más efectivo que resolver por separado”, comenta.
Asimismo, si bien Ian Watt señala que hubo presencia de ponencias y asistentes de Latinoamérica y el Caribe y varios colegas del Código Modelo Sísmico participaron, “ha faltado darle visibilidad al CMS en este evento, que es un desafío futuro”.
Rehabilitación y/o refuerzo de estructuras
Como explica Miguel Medalla, director de AICE, este tipo de eventos no se relaciona directamente con la realidad industrial-minera de manera específica. Sin embargo, “los conceptos que hoy se están desarrollando y profundizando respecto de la evaluación explícita del riesgo, ya sea en términos de protección de vida, económicos o de continuidad operacional, son, sin duda, aplicables y relevantes para nuestra industria minera. Recientemente, hemos tenido la oportunidad de aplicar aspectos relacionados con la evaluación explícita del riesgo sísmico en proyectos mineros-portuarios del país”, asegura.
De la misma forma, cree que herramientas basadas en conocimiento profundo, redes neuronales, entre otras, serán de mucha utilidad para el desarrollo futuro de la industria. “La academia chilena está cada vez más trabajando en estos aspectos. En particular, junto con algunos colaboradores, como el profesor Rodrigo Astroza (Universidad de los Andes, Chile) y el profesor Jawad Fayaz (Universidad de Exeter, UK) hemos estado trabajando en herramientas para la estimación de la amenaza sísmica y sistemas de alerta temprana con estas técnicas modernas”, cuenta Medalla.
Y añade que otros profesionales como Sergio Ruiz y Cesar Pasten, ambos de la Universidad de Chile, “están implementando estos nuevos métodos para evaluaciones de alerta temprana y amplificación de sitio respectivamente. No dudo que muchos otros profesionales en Chile están desarrollando labores similares”.
En relación con la mitigación de desastres en infraestructura, el especialista dice que cada vez más se están desarrollando herramientas de modelación y evaluación que permiten cuantificar de manera explícita y cuantitativa el riesgo sísmico, así como también de otras fuentes de peligro. “El solo hecho de poder cuantificar el riesgo, nos permite a los ingenieros evaluar distintas alternativas de mitigación y buscar aquellas que resulten más eficientes. Avances, por ejemplo, del impacto en la infraestructura producto del peligro asociado a eventuales tsunamis en nuestras costas está siendo investigado y estudiado por diversos profesionales en Chile, en particular, destaco los trabajos desarrollados por Rosita Junemann y Jorge Crempien, académicos de la Pontificia Universidad Católica”, sostiene.
En el caso de la rehabilitación y/o refuerzo de estructuras, Miguel Medalla da cuenta de que estos temas son «pan de cada día» en el sector industrial: repotencionamientos, aumentos de producción, modificaciones en el tipo de producción/operación, el deterioro natural de la infraestructura, demanda continuamente de esfuerzos para mantener la seguridad estructural y la continuidad de operación.
“Ahora bien, actualmente no hay claridad respecto de qué entendemos como rehabilitación o refuerzo estructural. El «para qué», «para cuánto», «en qué vida útil»,»bajo qué estándares», etc., son conceptos o preguntas que dependen del criterio de los proyectistas, mas no hay definiciones formales que tiendan a establecer un estándar relativamente común para estos propósitos”, comenta.
Con ello, no apunta a la necesidad de estandarizar y proponer una única forma de reforzar, lo que a su juicio, sería un error. Pero sí cree que algunas definiciones y procedimientos básicos debieran ser acordados y documentados como guía para la disciplina. “He tenido la suerte de participar en muchos proyectos de reforzamiento en mi carrera profesional, además, tengo la oportunidad de conversar continuamente con muchos profesionales en el contexto del curso «Revisión y Reforzamiento» del Diplomado de Diseño Estructural de Proyectos Industriales que dicta la Universidad de los Andes y lo que puedo concluir es que la diversidad de visiones, técnicas, métodos y consideraciones para este tipo de proyectos es infinita”, detalla.
Por otra parte, cuenta que con los ingenieros Diego Ramírez y María Jesús Aguilar (exdirectora de AICE), “estamos trabajando, en el contexto de sus trabajos de graduación de su Maestría, en reunir el estado de la práctica y el estado del arte en reforzamiento (tanto nacional como internacional) con el propósito de tener algo concreto para posteriormente poder discutir y proponer algunos lineamientos básicos en estos aspectos”.
Finalmente, asegura que “cada vez más los proyectos de reforzamiento se definen con propósitos más orientados en la producción y operación de las plantas (desde el concepto del riesgo) y no tan solo con propósitos de restitución de la capacidad estructural original solamente”.