Descentralización y construcción modular en la región de Aysén

Descentralización y construcción modular en la región de Aysén

Descentralización se diferencia de desconcentración por transferir las competencias desde un poder central a uno regional. Estamos en el año 2022 en una región de Aysén con menos de 100 años de historia, desconectada del resto del territorio, en un país que está en un proceso de redistribución del poder o al menos de cambio social e, incluso, una pandemia y podría resultar fuera de lugar preguntarnos cómo descentralizamos el poder central del país y construimos más viviendas en las regiones mediante sistemas modularizados, no obstante, eso hemos estado haciendo desde el sector público y privado en la región de Aysén. 

En particular, tendría que remontar mi interés personal por aportar a través de la ingeniería al bienestar de nuestra sociedad, al momento en que desarrollé mi tesis de grado en el año 2007 que trató de “construcción de viviendas sociales de madera aisladas acústicamente”, en la cual los métodos numéricos nos permitían -mediante la adopción de las ecuaciones de onda adecuadas- modelar el sonido y cuantificar a través de mapas de calor cómo un simple tabique en el entretecho permitía reducir el ruido transmitido a una sala contigua, ocupando la técnica como medio para un fin de carácter social.

En Coyhaique, en la constructora LyD S.A. se pueden apreciar los esfuerzos mayores para la producción de viviendas sociales en forma industrializada. Como calculista, en nuestra empresa Taller Civil  SpA hemos podido trabajar junto a otros profesionales de las empresas constructoras en un prototipo en donde ya no son solamente paneles, sino que ahora la intención es modularizar el volumen total de la vivienda, para optimizar el recurso, disminuir el tiempo de montaje y disminuir el costo del proceso.

En nuestro rubro los arquitectos tienen la mayor posibilidad de hacer un aporte social con su trabajo, al proponer nuevas formas y disposiciones en el terreno, pero no es tan fácil que la ingeniería estructural pueda hacer un aporte también, al menos no es tan común. No obstante, al trabajar en nuestros proyectos en la zona, podemos darnos cuenta que siempre es posible contribuir al poner un mayor esfuerzo en innovar, aún cuando no se cuente con muchos ejemplos que imitar. Ahora, en nuestra empresa, estamos tratando de implementar a escala de laboratorio las condiciones para elaborar elementos de hormigón prefabricados, en los cuales es imprescindible que trabajemos arduamente en aspectos de metrología relacionados con la magnitud fuerza, longitud principalmente, y de aplicar sistemas de gestión de calidad con estándares internacionales como la NCh ISO:17025, que nos permita ofrecer un servicio y un producto que cumpla los requisitos mínimos que la construcción modularizada requiere para ser una alternativa igual de válida que la tradicional , pero con la ventaja de aprovechar la economía de escala, optimizar los recursos siempre escasos en nuestra sociedad.