Estructuras con historia: Obras para las ciencias e investigación

Estructuras con historia: Obras para las ciencias e investigación

Todos los países del mundo han debido enfrentar una serie de desafíos que, muchas veces, aparecieron de manera simultánea y sin previo aviso. Estas situaciones han creado la necesidad de buscar soluciones, a través de procesos largos y complejos, generando conocimiento que ha sido fundamental para aquellas sociedades. Esto es  lo que se  hace a través de las ciencias y la investigación.

Y si hablamos de ingeniería estructural en un país con características geográficas particulares y uno de los más sísmicos del mundo, estos conocimientos han sido claves para -literalmente- mantenernos en pie. En esta categoría, más que resaltar estructuras determinadas, hemos querido relevar la importancia de organismos que han sido claves en la investigación de nuestros suelos, materiales, técnicas constructivas y definición de requerimientos estructurales, permitiendo generar conocimiento, desarrollo profesional y normativas que resguarden la calidad de los diseños y construcciones en nuestro país.

Cada uno de estos organismos ha aportado al desarrollo de la ingeniería y seguirán enfrentando nuevos desafíos, en búsqueda de conocimientos que no solo permitan garantizar la serviciabilidad de nuestras estructuras, sino que también nos ayuden a que sus diseños sean más efectivos, sostenibles y amigables con el medio ambiente.

CENTRO DE INVESTIGACIÓN, DESARROLLO E INNOVACIÓN DE ESTRUCTURAS Y MATERIALES (IDIEM)

Fundado en 1898 como el Taller de Resistencia y Ensayo de Materiales de la Universidad de Chile, el instituto nace para cumplir con labores docentes, en particular de la carrera de ingeniería civil de la época y como apoyo al Ministerio de Obras Públicas. Comenzó a funcionar en un pequeño recinto en la Casa Central y su principal objetivo era ensayar y verificar la calidad del cemento que se emplearía en la construcción de la dársena del Puerto de Valparaíso.

En la década del 20, complementa su campo de acción agregando al laboratorio el Departamento de Caminos, que trajo como consecuencia incorporar más equipos y profesionales. En los 30, el Gobierno entrega mayores y grandes responsabilidades al taller, incluyendo los controles de calidad de la producción del cemento, acero, cobre, cales, yesos y productos de asbesto-cemento, entre otros.

El Terremoto de Chillán de 1939 tuvo un enorme impacto en el país que repercutió en la elaboración de normas, mejoras en la fiscalización y en el control de calidad de las construcciones. En este tiempo también se comienza a fomentar la producción local de materiales, por la crisis generada por la Segunda Guerra Mundial. Por esta razón, en 1940 el MOP le otorga a la institución la responsabilidad de verificar las calidades de los materiales nacionales de construcción.

En 1946 el Taller de Resistencia de Materiales pasa a llamarse Instituto de Investigaciones y Ensayos de Materiales (IDIEM) y cambia sus dependencias a un nuevo edificio de 5 mil metros cuadrados ubicado en Plaza Ercilla, inaugurado en 1952. El terremoto de 1960 obligó al país a desarrollar estudios sobre mecánica de suelos y la resistencia de los mismos, generando un fuerte impulso a la investigación y la academia.

La historia del IDIEM se ha forjado junto al desarrollo de la construcción y la infraestructura en Chile, a través de la técnica, la ingeniería, pruebas e invenciones, normativas, innovación y progreso. Perteneciente a la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la U. de Chile, actualmente cuenta con laboratorios y presencia en distintas regiones del país, donde además entrega asesoramiento tecnológico al mundo público y privado.

OBSERVATORIO ALMA

En el desierto de Atacama, a más de 5000 m.s.n.m, se encuentra el mayor observatorio astronómico del mundo. Los ingenieros Eduardo Donoso y Claudio Cabrera lideraron las obras del sitio del observatorio, creado con la colaboración internacional de más de una veintena de países, siendo el mayor proyecto astronómico basado en tierra desarrollado hasta el momento.

El Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA) es un interferómetro que comprende 66 antenas, de 7 a 12 mts de diámetro y alrededor de 100 toneladas cada una, que trabajan coordinadas para formar el telescopio más grande del planeta. La parte más visible de cada antena es el disco, una gran superficie reflectante, que juega el mismo papel que el espejo de un telescopio óptico, aunque estas antenas no son espejos, sino que poseen paneles metálicos como superficie reflectora.

Se encuentran agrupadas en un perímetro de 15 kms por el llano de Chajnantor, uno de los mejores lugares del mundo por sus condiciones climáticas (altura que garantiza la ausencia de humedad en la atmósfera, que alteraría las observaciones).

Las antenas y sus estructuras, principalmente formadas por aluminio y acero, pueden desplazarse recorriendo distancias que van de 150 mts a 16 kms, arriba de camiones con una longitud de un edificio de 5 plantas, lo que proporciona a ALMA un poderoso zoom variable. Entró en funcionamiento en 2011 y mensualmente se realizan mantenimientos mecánicos y eléctricos debido a las condiciones extremas y cambios de temperatura que soportan (oscilando entre los -20°C y los 10°C).

Además, el complejo cuenta con edificaciones, diseñadas con los más altos estándares arquitectónicos y estructurales, para albergar a los científicos y técnicos que ahí  trabajan, y que durante su estadía requieren instalaciones adecuadas para dormir, comer y tener esparcimiento. 

CENTRO DE INNOVACIÓN EN MADERA (CIM UC)

El Centro de Innovación en Madera (CIM UC CORMA) nace en 2014 como una alianza estratégica de las Facultades de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos; Ingeniería y Agronomía e Ingeniería Forestal bajo el alero de la Pontificia Universidad Católica de Chile, en conjunto con empresas líderes del sector privado e impulsado por el Ministerio de Vivienda y Urbanismo.

Uno de los principales desafíos del CIM UC CORMA es explorar el potencial de la construcción en madera y promover la construcción de madera en altura a través de soluciones constructivas eficientes, sustentables y con altos estándares, desarrollando todo el potencial de un país forestal a través del uso de este material altamente versátil, tecnológico, ecológico y durable.

El Centro promueve la formulación y ejecución de proyectos para la investigación, además del desarrollo normativo, tecnológico y social de la construcción en madera en altura, considerando que este material proporciona una oportunidad única para avanzar en nuevos productos que aporten al desarrollo de sistemas de construcción industrializados más amigables con el entorno (reducción de costos y aumento significativo de la calidad en el producto terminado). Por esto, actualmente trabajan con más de 40 investigadores de áreas como la forestal, bioproductos y construcción, desarrollando servicios y generando investigaciones colaborativas para apoyar las necesidades de la industria y el Estado.

El CIM UC se proyecta como un actor clave para contribuir a una transformación radical de la industria de la construcción, buscando hacerla más eficiente y sustentable, a través de la masificación de la construcción en madera. Uno de sus anhelos es lograr generar las condiciones técnicas, ambientales y de habitabilidad para que edificios de 15 pisos puedan ser realizados con estructuras de este material.